Rajoy presume de crecimiento y anuncia la nueva agenda reformista

El presidente del Ejecutivo prevé la creación de 500.000 nuevos empleos y la subida del PIB en cuatro décimas más de lo esperado.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, anunció ayer que el PIB crecerá este año un 2,4%, cuatro décimas más que la estimación inicial del Gobierno, y se crearán más de 500.000 nuevos empleos, con un incremento del consumo del 3% y un alza de la inversión en bienes de equipo por encima del 7%.

Durante el Debate sobre el estado de la Nación, Rajoy indicó que esta mejora de la previsión de crecimiento “no es voluntarista”, ya que “numerosos” analistas dicen que España superará el 2,4% de crecimiento, por lo que el Gobierno trabajará para que “esto se así y para que la realidad pueda superar las expectativas con el trabajo de todos”.

La nueva previsión de incremento del consumo supone una revisión al alza de un punto respecto al último cuadro macroeconómico, mientras que la de bienes de equipo se mantiene en el 7%. Tras siete años consecutivos de caída, el Ejecutivo espera que crezca la construcción residencial y no residencial.

Además de la mejora del consumo y de la inversión en bienes de equipo, Rajoy aseguró que en 2015 se producirá una mejora del sector exterior, un superávit por cuenta corriente y una capacidad de financiación de España con el resto del mundo del 1% del PIB, así como un comportamiento favorable de los precios.

“Con estas previsiones estaremos claramente en condiciones de crear más de 500.000 empleos solo este año. Es decir, llegaremos al final de la legislatura con un millón de empleos creados durante 2014 y 2015”, señaló el presidente del Gobierno, tras asegurar que “cumple sus objetivos” y supera sus previsiones. “Hay quien podría pensar que únicamente resta esperar a la cosecha. No es el caso de este Gobierno”, añadió.

De hecho, resaltó que la legislatura no está agotada como tampoco lo está la agenda reformista del Gobierno, que se centrará ahora en aprovechar “al máximo el crecimiento”, consolidar la recuperación y extender sus efectos a todos los niveles.

Reformas

La agenda del Gobierno se centrará así en favorecer la creación de empleo y la calidad del mismo, mejorar el bienestar social, garantizar la solidez del crecimiento y la competitividad y promover la estabilidad institucional necesaria para acometer estas tareas con éxito. Además, el Gobierno seguirá impulsando medidas para facilitar la actividad económica, para adecuar el marco jurídico al potencial de la recuperación y para mejorar la capacidad de crecer, competir y crear empleo.

“Es decir, continuaremos haciendo reformas estructurales y consolidando aquellas que ya están en marcha. Reformas que suponen un profundo cambio en la fachada de nuestro país, nuestra economía y nuestro sector público”, dijo el presidente, tras resaltar alguno de estos cambios como la Ley de Desindexación, que permitirá reforzar el control sobre los precios y el mantenimiento de la competitividad.

Asimismo, impulsará la plena operatividad de la Unidad de Mercado, con la adaptación normativa para asegurar sus plenos efectos, la reforma de 35 normas estatales, que abarcan medidas de flexibilización y racionalización en sectores tan diversos como la inserción laboral, el transporte, las inspecciones técnicas de vehículos, o las telecomunicaciones.

El presidente se preguntó cuántos empleos necesita España para que su crecimiento se consolide, deje de correr riesgos y para que el país se sienta seguro ante las eventualidades o los cambios de coyuntura.