Entran en vigor las tasas de 2017 marcadas por la polémica del cambio de categorías en las terrazas

El criticado ‘tasazo’ del agua de 2016 deja paso este año a una nueva tarifa con cuatro tramos diferenciados de consumo

Debatidas, protestadas, criticadas… Las tasas y precios públicos del Ayuntamiento entraron en vigor el pasado 1 de enero y lo hicieron tal y como las propuso el equipo de Gobierno desde el principio, a pesar de a la mayoría de los grupos de la oposición no les convencía la propuesta, como demostraron en la votación. Y eso, a pesar de que se creó una mesa en la que todos estaban representados para trabajar en ellas desde una posición común.

Finalmente, como ya pasara en 2015, las tasas fueron aprobadas por el voto de calidad de la alcaldesa, Clara Luquero, al producirse un empate con los doce votos a favor del equipo de Gobierno socialista, la abstención del único concejal de Izquierda Unida y el voto en contra de los otros doce ediles presentes en la corporación —pertenecientes a los grupos PP (8), Ciudadanos (2) y UPyD – Centrados en Segovia (2)—.

Era el 30 de septiembre y el pleno fue largo, con cruces de acusaciones continuas, reproches y esas pequeñas cosas que caracterizan los debates políticos cuando de lo que se habla es de dinero. Comenzaba entonces el periodo de las alegaciones, bastante más tranquilo que el del año anterior, cuando la modificación de la tasa de agua y la implantación de lo que se conoció como ‘tasazo' provocó una avalancha de protestas y llegaron centenares de alegaciones al Ayuntamiento.

Así, en esta ocasión, el único escrito presentado contra las tasas procedía de la Asociación de Industriales Hosteleros de Segovia (AIHS), debido a la modificación en la categorización de las terrazas y veladores que se instalan en la vía pública, principal punto de las críticas sobre la propuesta del equipo de Gobierno.

Y es que la tasa de las terrazas —oficialmente, la tasa por la utilización privativa y el aprovechamiento especial del dominio público — es la que mayor modificación ha sufrido, por una parte porque se bajan los precios de todas las categorías, menos la ‘Especial' (la más cara, pues es la que afecta a las principales zonas turísticas, con mayor afluencia de visitantes); y por otra parte, porque se han cambiado las categorías de muchas calles del casco histórico y la zona centro de la ciudad, de modo que algunos establecimientos pasan de estar en las categorías una o dos a la ‘Especial', con el consiguiente aumento del impuesto que eso supone para ellos.

La tasa aprobada finalmente queda de la siguiente manera: la categoría ‘Especial', la que afecta a las zonas de mayor influencia turística, 81,82 euros por metro cuadrado; la primera, 47,53 euros; la segunda, 23,25 euros; la tercera 9,64 euros; y la cuarta (la de los barrios incorporados y la Entidad Local Menor de Revenga), 0,98 euros.

Las quejas de la AIHS se centraban en tres puntos fundamentales: primero, que en algunas calles se subían dos categorías de golpe; segundo, que algunas de las calles con mayor categoría estaban alejadas de las zonas de influencia turística; y tercero, que si se bajaba el precio a todas las categorías, tenía que bajarse también a la ‘Especial' “por un tema de igualdad”.

La alegación de los hosteleros fue desestimada, ya que el cambio en la categorización se había realizado en función a unos estudios previos, aseguró entonces el portavoz del equipo de Gobierno, Alfonso Reguera, y no por capricho.

Así pues, se ratificó el acuerdo alcanzando en el pleno del 30 de septiembre; a finales de noviembre se aprobó la Modificación y revisión de las Ordenanzas Fiscales y Precios Públicos de 2017; y el Boletín Oficial de la Provincia las publicó el pasado 14 de diciembre, cumpliendo así todos los trámites.

Fin al ‘tasazo' Las tasas de 2016 estuvieron marcadas por el ‘tasazo' del agua, que sacó a la calle a los vecinos en varias ocasiones para protestar contra lo que consideraban unos tramos abusivos y el fin de las bonificaciones del 50 por ciento que tenían los barrios incorporados.

Este año, la tasa del servicio del agua establece cuatro tramos de consumo: los primeros 15 metros cúbicos, cero euros; desde 16 hasta 25 metros cúbicos, a 0,60 euros; desde 26 hasta 50 metros cúbicos, a 0,67 euros; y a partir de 51 metros cúbicos, a 1,65 euros. La medida convenció a los grupos políticos, al menos gustaba más la nueva distribución, por establecer más tramos, aunque la falta de bonificaciones para las familias numerosas sí que ha sido muy criticada.