La Feria Arce de Segovia cumple las expectativas del gremio de ceramistas

La vigésimo segunda edición de la muestra artesana cerró ayer sus puertas tras seis días intensos de afluencia de segovianos y turistas y un buen nivel de ventas

La XXII Feria de Cerámica y Alfarería de Segovia (Arce) ha cerrado sus puertas, tras seis largos e intensos días, en los que el buen tiempo ha incrementado el número de segovianos y turistas que se han acercado a la avenida del Acueducto a curiosear y comprar las creaciones de los treinta expositores que han expuesto sus trabajos durante el puente festivo. “Es cansado, porque son muchos días y muchas horas de pie, pero estamos contentos, porque se han cumplido nuestras expectativas”, explicaba José María Gil Martín, portavoz de Cocerse, el colectivos de ceramistas de Segovia que organiza la feria. “Ha hecho bueno, el público en Segovia no nos ha defraudado, porque ha venido y ha participado en la feria, y aunque siempre se espera un poco, nos hemos ido acostumbrando a la situación actual y estamos conformes”, añadía.

La Feria Arce ha combinado un año más innovación y tradición, cerámica y alfarería, en una muestra que ha presentado piezas de colección, elementos de decoración, complementos de vestuario y útiles domésticos, creados con una gran diversidad de técnicas, desde las más tradicionales a las más vanguardistas. Sin duda, la cerámica utilitaria, ha triunfado en las ventas de este año. Quizás por aquello de que Segovia es tierra de cochinillo y lechazo y la cazuela de barro y el horno de leña son dos elementos indispensables para conseguir un buen asado, la alfarería tiene mucho éxito en esta feria. Así lo cree José María Gil Martín. “Se sigue cocinando y es un material que al ser utilizado, pues se rompe y hay que reponer. Y también, en el nuevo tiempo gastronómico que estamos viviendo, esta cerámica utilitaria de uso cotidiano va tomando un cierto protagonismo que nosotros agradecemos”.