La AIHS pide que el mercadillo de los jueves se vaya de la Plaza Mayor

La agrupación de hosteleros, a iniciativa de establecimientos afectados, ha iniciado una campaña de recogida de firmas y pide trato igualitario sobre exigencias de uniformidad

Un grupo de empresarios de hostelería de la Plaza Mayor ha instado a la AIHS a la recogida de firmas para solicitar al Ayuntamiento que el mercado al aire libre de los jueves en la Plaza Mayor se traslade a un lugar distinto, ya que consideran que perjudica su actividad, principalmente por la imposibilidad de instalar terrazas en las horas de celebración de este tradicional mercadillo.

Algunos establecimientos han iniciado ya esa campaña de recogida de firmas entre sus clientes y la medida no es bien recibida entre residentes del centro histórico. Así, desde la Asociación de Vecinos del Recinto Amurallado (AVRAS), su portavoz, Pedro Montarelo, mostraba ayer su oposición al cambio de lugar para este mercado.

Mientras el presidente de la AIHS, Julián Duque, o el director gerente de la agrupación, Javier García Crespo, apuntan a que este mercado al aire libre podría celebrarse sin problemas en un paraje del centro histórico como el paseo del Salón, Montarelo apunta que esa propuesta del sector de la hostelería no es nueva y ya en otras ocasiones se han descartado ese y otros emplazamientos por motivos de seguridad, relativa principalmente a los accesos. “En este momento la Plaza Mayor es el único espacio que ofrece una buena entrada y salida de vehículos mientras se celebra el mercado”, señala este portavoz vecinal.

Duque insiste, por otro lado, en que se trata de una cuestión de coherencia, ya que entiende que el mercado al aire libre, tal y como está, es un atentado a la imagen de calidad turística que debe tener una ciudad declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Los responsables de la agrupación de hosteleros indican que mientras a los establecimientos de la Plaza Mayor se les exige cumplir con una serie de requisitos estéticos y uniformidad en sus terrazas, con los puestos del mercadillo parece que hay “patente de corso”, en palabras de Duque.

Tanto él como García Crespo indican que se está produciendo una situación de discriminación que perjudica directamente a los negocios de hostelería que durante más de cincuenta días al año tienen que prescindir de la instalación de terrazas por las mañanas y hasta las cuatro de la tarde. Indican que, cuando menos, debería exigirse a los promotores de los puestos del mercado uniformidad y estética.

Montarelo no se muestra contrario a esta última medida, acordada por el pleno en septiembre de 2011 pero no llevada a efecto, pero entiende que cuenta con bastante resistencia por parte de los comerciantes del mercado. Una opción que se ha planteado en otras ocasiones es que el Ayuntamiento lo promueva con rebajas en la tasa por ocupación del espacio público.

En cuanto a la ordenanza municipal sobre instalación de terrazas de hostelería, para los establecimientos de la Plaza Mayor indica que el mobiliario (mesas, sillas, sombrillas, toldos, etc.) debe ser de colores neutros y carentes de publicidad a excepción de los logos o nombres comerciales de los bares y/o restaurantes. Además, no pueden ser de plástico, resinas sintéticas o aluminio, salvo que se ‘vistan' con manteles o textiles.

Una moción de 2011

En el pleno celebrado el 6 de septiembre de 2011 se aprobó una moción del Partido Popular para que el Ayuntamiento articule unas normas que unifiquen la estética de las estructuras metálicas y toldos de los puestos del mercado al aire libre de los jueves en la Plaza Mayor. Han transcurrido casi cinco años sin que se hayan llevado a cabo estas medidas. En marzo de 2014 el entonces concejal popular José Antonio Garvía incluía este incumplimiento junto a otras diecinueve mociones aprobadas por la corporación pero no realizadas. En la última sesión plenaria, la del mes de abril celebrada el pasado viernes, la portavoz del Grupo Municipal Popular, Raquel Fernández, volvió a referirse a la moción sobre el mercado al aire libre de los jueves de 2011 a raíz de la petición de Ciudadanos de controlar el cumplimiento de los acuerdos plenarios.