Fue la sorpresa del pleno celebrado ayer en el Ayuntamiento de Segovia. Cuando parecía que habría unanimidad para aprobar la recalificación del suelo donde se ha construido el centro Carlos Melero, Francisco Vázquez, presidente de la Diputación e integrante del Grupo Municipal Popular, votó en sentido contrario al del resto de concejales, incluidos sus compañeros del PP.
Después explicaba que el equipo de Gobierno en la institución provincial estudia impugnar la adjudicación de este complejo deportivo y, por coherencia con esa posibilidad, decidió no votar a favor, teniendo en cuenta, añadió, que este punto se había incluído de urgencia en el orden del día.
De hecho, como al final de la sesión explicó Vázquez a EL ADELANTADO, ya en el mes de febrero había amagado o advertido sobre la posibilidad de que la Diputación impugnara estas decisiones acordadas por el pleno del Ayuntamiento de Segovia, coincidiendo con el anuncio realizado por el excalcalde de Segovia Pedro Arahuetes de recurrir la licencia de obras del palacio de congresos de La Faisanera.
Aunque en ese momento pasó prácticamente inadvertido, o no se tomó demasiado en serio por otros dirigentes políticos, Vázquez ya insistió en que la Diputación “sí puede adoptar una medida de este tipo, y más en materia de Urbanismo”, mientras que no es de recibo que lo haga un ayuntamiento con otro, según su argumento.
Así, el presidente de la Diputación, que también lo es del PP provincial, recalcaba que “algo tendrá que hacer la Diputación para defender la legalidad urbanística” y ayer mismo insistía en que, al margen de “una cuestión administrativa”, como calificó a la aprobación de la modificación del plan parcial por el pleno del Ayuntamiento o por la propia Consejería de Fomento, no descarta la impugnación ante los tribunales, “algo que puedo hacer en cualquier momento, para eso no hay plazo”, dijo.
Pero con ese voto en contra Vázquez siembra la duda sobre la voluntad declarada por otros concejales del PP de contribuir a solucionar el problema planteado por dos sentencias del Tribunal Superior de Justicia, que reconocen como ilegales por una parte la licencia de obras y, por otra, la adjudicación de la construcción y de la explotación de las instalaciones.
De hecho, en el pleno hubo un rifirrafe entre el concejal de Urbanismo, Alfonso Reguera, y la edil del Grupo Popular Raquel Fernández, en la que esta última aseguraba que nunca ha sido intención del PP echar atrás el proyecto, aunque criticó una vez más la forma de actuar del equipo de Gobierno socialista, a su juicio “irresponsable”, al tiempo que anunciaba el voto favorable de los concejales populares.
Por otro lado, Reguera defendió el trabajo realizado por el equipo de Gobierno y la Concejalía que dirige y explicó que la modificación del plan parcial, que cuenta “con todos los parabienes de los organismos y entidades a los que se ha sometido”, ha sido necesaria por la existencia de un error en su redacción, de forma que el terreno sobre el que se ha construido parte del Centro Deportivo Municipal Carlos Melero figuraba como como espacio libre sin edificabilidad.
El concejal afirmó que “estoy seguro de que en otoño los segovianos podrán disfrutar de este centro” y añadió que “si no se hubiera actuado como se hizo no estaría construido hasta dentro de dos años”. Antes había hecho una introducción recordando los pasos dados para recalificar el solar, procedimiento que se inició el 29 de agosto de 2013, según dijo, después de que los servicios técnicos del Ayuntamiento y de la Junta de Castilla y León detectaran el citado error, según comentó.
Reguera recordó que se ha contado con el visto bueno, entre otros, del consejero de Fomento, Antonio Silván, y del Consejo Consultivo de Castilla y León, que han ratificado “el interés público”.
Sin embargo, aunque el equipo de Gobierno “da por zanjado el problema”, la concejala del Partido Popular Raquel Fernández pidió al responsable de Urbanismo en el pleno que “no saque pecho” e indicó que fue ella misma quien advirtió al resto de la corporación en marzo de 2012 de que había un error en el planeamiento y solicitó que se resolviera con anterioridad a la adjudicación de las obras.
Fernández puso de manifiesto que el Grupo Municipal Popular no puede estar de acuerdo con la forma de proceder de los socialistas, calificando la parcela ‘a posteriori', cuando ya se han construido las instalaciones. Para la concejala se trata de “una auténtica irresponsabilidad”, ya que el trámite de modificación del plan parcial comenzó un año y cinco meses después de su advertencia. Reconoció que finalmente que con la recalificación aprobada ayer “se resuelve uno de los problemas urbanísticos más gordos que el Ayuntamiento tenía sobre la mesa” pero recordó que, mientras tanto, se han dictado dos sentencias firmes, se ha producido un retraso en la recepción de las obras del complejo y se ha corrido un riesgo “que podía haber tenido consecuencias económicas muy graves, porque ustedes decidieron tirar para adelante y construir un edificio que era ilegal, una forma de actuar temeraria”.
Fernández recalcó, por último, que todavía “no existe empresa concesionaria”, ya que el acuerdo plenario de adjudicación “fue declarado nulo” en los tribunales” a pesar de que Forus Segovia haya abierto la matrícula a través de dos casetas instaladas en vías públicas.