La Academia de Artillería formó a cerca de 1.500 militares en 2011

El 85 por ciento de los artilleros que pasan por el centro participan en cursos de perfeccionamiento y en prácticas de tiro en el Centro de Simulación, que es visitado por unidades artilleras de toda España.

En uno de los años más difíciles de su historia, donde los rumores sobre su permanencia en Segovia volvieron a surgir esta vez con más fuerza que en anteriores ocasiones, la Academia de Artillería de Segovia cerró 2011 con uno de los balances más positivos de su historia. Por las aulas del tricentenario centro de enseñanza militar ubicado desde hace 150 años en el antiguo convento de San Francisco pasaron el pasado año cerca de 1.500 oficiales y suboficiales del arma, que llevaron a cabo su formación tanto en los cursos reglados como en las distintas enseñanzas de perfeccionamiento que se imparten a lo largo del periodo

docente.

Conforme a los datos facilitados por el propio centro, con una plantilla que alcanza las 350 personas entre personal militar y civil, la Academia de Artillería forma actualmente a 175 alumnos para el ingreso en las diferentes escalas de oficiales y suboficiales, de los cuales el 10 por ciento son mujeres. Los oficiales completan este curso su formación con arreglo al antiguo plan de estudios del centro, mientras que los suboficiales comienzan desde hoy el nuevo modelo educativo derivado del «Plan Bolonia», que impartirá en Segovia las titulaciones de Técnico Superior en Mecatrónica Industrial y Administración de Sistemas Informáticos en Red, imprescindibles para alcanzar el empleo de sargento de cualquier especialidad artillera.

Para ello, se ha llevado a cabo un ambicioso proyecto de mejora de las instalaciones del acuartelamiento de Baterías, que han servido para remodelar dos antiguos edificios de hangares y talleres para transformarlos en aulas dotadas de todos los medios necesarios para el desarollo de ambas especialidades. Las obras también han incluido la adaptación de los edificios de alojamientos de los alumnos de primer curso, y la mejora y modernización de servicios básicos tales como alcantarillado, saneamiento y electricidad.

A la formación reglada se añaden los más de 300 alumnos que a lo largo del año acudieron a la Academia para participar en los cursos de perfeccionamiento que se imparten en el centro. Especialidades en Sistemas de Dirección de Tiro y de Detección y Localización de Objetivos, Contramedidas Electrónicas, Mando y Control de Artillería y Mando Táctico y Mantenimiento son demandadas por los oficiales del arma, que acuden a Segovia para completar su formación.

Mención aparte merece la actividad del Centro de Simulación de la Academia de Artillería, que el pasado año recibió a más de un millar de usuarios procedentes de todas las unidades artilleras de España y que posee los sistemas más avanzados en prácticas de tiro virtual. Este hecho hace que el centro reciba también visitas frecuentes de representantes de ejércitos de otros países y universitarios y especialistas interesados en las aplicaciones tecnológicas.

En materia de investigación, la jefatura de Adiestramiento y Doctrina ha impulsado la investigación sobre nuevas tendencias en apoyos de fuego y defensa aérea, y se han llevado a cabo publicaciones sobre doctrinas, normas y procedimientos artilleros, así como la actualización de otras publicaciones artilleras más antiguas.

La cultura, una constante preocupación.- Además de su labor docente e investigadora, la Academia de Artillería no descuida su faceta cultural, que este año aprovechará la conmemoración del 150 aniversario de la instalación del Real Colegio de Artillería en su actual ubicación del antiguo convento de San Francisco para llevar a cabo una serie de actividades culturales, actualmente en preparación. Aunque aún no se ha desvelado el programa de actividades, una de las que se llevará a cabo será la publicación de un libro de fotografías sobre la Academia que próximamente verá la luz. Además, la Biblioteca de la Academia de Artillería ha organizado durante 2011 algunuas interesantes exposiciones como la titulada “La huella de la Química, las huellas de Segovia”, en colaboración con IE Universidad, y que sirvió para conmemorar el Año Internacional de la Química. La Biblioteca, una de las más importantes del mundo en esta especilalidad cuenta ya con más de 50.000 volúmenes catalogados, conforme al proceso llevado a cabo por sus responsables, y ha cedido algunos de sus fondos históricos para participar en distintas exposiciones temporales organizadas por organismos públicos y privados.