Por primera vez en la temporada el Segovia Futsal logró meterse en puestos de fase de ascenso a Primera División, después de sumar su quinta victoria consecutiva tras doblegar el Elche en un encuentro que se está convirtiendo en ‘clásico’ del equipo de Diego Gacimartín en el Pedro Delgado, dominador al principio, con lagunas en la parte central del choque, y goleador en los compases finales.
Los dos equipos apostaron por ser ambiciosos en la presión durante los primeros minutos del encuentro, y en ese planteamiento salió victorioso el conjunto de casa, que cerró todas las vías de penetración a su oponente en un arranque de partido sin goles, pero con la sensación de tener el choque controlado por parte local, que consiguió el 1-0 gracias a un tanto de Buitre después de una perfecta asistencia de Chus.
El Elche, muy desdibujado en la primera mitad, recibió el 2-0 después de otro robo de pelota culminado por Javito, y apenas probó a Alberto, pero cuando lo hizo pudo comprobar que el guardameta segoviano no estaba todo lo seguro que se le suponía. Así, tras un error de Javito en un control llegó el empate a uno, y una mala salida del meta local se convirtió en el 2-2, obra de Carri tras varios rechaces dentro del área.
Así que, sin hacer prácticamente nada el conjunto ilicitano se vio metido en el partido, por más que Iván Quintín, en una acción ensayada de córner, pusiera el 3-2 antes del descanso.
De cerrado, a abierto
Con los dos contendientes sabiendo lo que había en juego, el partido no fue de numerosas ocasiones de gol en su primer acto, pero la situación varió en el segundo tiempo, cuando llegó el cansancio, y con él los errores de todo tipo. Pitu igualó de nuevo el choque tocando suavemente de primeras un envío en profundidad, y el portero Javi se encargó de frenar las acometidas segovianas, lo mismo que Alberto los contragolpes visitantes, cuando el partido pasó a ser de ida y vuelta.
Un gol, y una expulsión Un arranque de furia de Iván Quintín se convirtió en el 4-3 que fue fatídico… para el Segovia Futsal, porque el jugador se equivocó en la celebración, levantándose la camiseta por encima de la cabeza, y recibiendo por ello la segunda amarilla, con lo que el equipo de casa se quedó con cuatro hombres durante dos minutos, que fueron menos porque Óscar Ruiz colocó el 4-4 pocos segundos después de la expulsión.
Así que, a diez minutos para el final, el partido estaba igualado, con el Elche bastante más intenso en la faceta defensiva, y el Segovia Futsal sin uno de sus baluartes. Pero en ese momento jugadores como Dani Mejías, Edu y Javi Antona cogieron la responsabilidad de apoyar tanto a Buitre como Alvarito en el control del juego, Alberto elevó su nivel para salvar el 4-5 en un remate al segundo palo de Kiwi que salvó de manera extraordinaria, y el resto lo pusieron los colegiados al mostrarle la segunda amarilla al propio Kiwi tras un leve empujón a Edu.
…y Buitre, al final El Segovia Futsal no jugó bien los dos minutos de superioridad, pero agotó de tal manera al Elche, con dos rotaciones menos tras la expulsión más la lesión poco antes de Pitu, que el equipo ilicitano no volvió a inquietar la portería segoviana hasta que, a cuatro minutos para el final, su técnico se vio obligado a poner a Jesús García de portero-jugador para tratar de contrarrestar el 5-4, obra de Buitre al transformar una falta cometida sobre Javi Antona.
La defensa segoviana del cinco para cuatro fue bastante solvente, ya que impidió al Elche el generar claras ocasiones de gol, y Alberto se redimió de errores anteriores sacando a córner un despeje de Edu que se colaba en la portería. Con el tiempo casi cumplido, Buitre marcó a puerta vacía el sexto gol del Segovia Futsal, que sigue exhibiendo unas importantes virtudes que le han llevado a ser actualmente el equipo más en forma de la Segunda División más igualada de las últimas temporadas.
