El pavo que nunca falla

La 79ª edición de la Carrera del Pavo para bicicletas sin cadena reunió a 74 participantes en la mañana del día de Navidad.

Al igual que los abuelos, que reúnen a toda la familia a su alrededor para relatar sus historias y anécdotas como una de las típicas estampas navideñas, por estas fechas en Segovia tampoco puede faltar la presencia de una señora casi octogenaria, pero llena de frescura, que es capaz de congregar a cerca de 2.500 personas de todas las edades a su llamada de cada mañana de Navidad, desde hace 79 años. Se trata, cómo no, de la Carrera del Pavo para bicicletas sin cadena.

Atrayente y magnética como si no pasara el tiempo por ella, esta prueba organizada por el Club Ciclista 53×13 tuvo este año la meteorología de su lado. Y es que, después de una lluviosa edición en 2013, esta vez el sol brilló en lo alto. Eso sí, las temperaturas invitaban a abrigarse a conciencia, para disfrutar a pie de calle observando a los valientes ciclistas que comenzaron la carrera con rigurosa puntualidad, a las 11.30 horas desde la plaza Día Sanz.

Por ello, la participación aumentó con respecto al año pasado, de 56 a 74 apuntados, entre los que se encontraban tres mujeres: Alicia Cuesta, Inés Torres y Marina Cuesta. Un alto número de inscritos pero un solo ganador, que fue —por cuarta edición consecutiva— Julio Martín Gómez.

Para decidir el nombre del vencedor hubo que recurrir a una tanda de desempate, ya que cuatro hombres consiguieron llegar a la meta situada en la plaza Adolfo Suárez (antigua plaza del Seminario). Así, junto al que iba a ser el campeón, completaron el recorrido Miguel Martín Martín, que logró la segunda posición final; José Antonio Fraile Herrero, tercero; y Alfonso Martín Otones, que se quedó fuera del pódium, terminando en cuarto lugar.

Por ello, tras lanzarse uno a uno todos los corredores por la calle Teodosio el Grande y subir la cuesta de la calle Cervantes hasta —quien aún tuviera fuerzas— girar dejando a la derecha la Casa de los Picos, se celebró el desempate, en el que Julio Martín se distanció muy pronto de sus tres rivales, desde el mismo inicio de la Calle Real, para acabar alzándose con el triunfo en solitario, alcanzando de nuevo a la meta.

En definitiva, la 79ª edición de la Carrera del Pavo fue multitudinaria en cuanto a la participación y al público, y emocionante en lo que se refiere a la competición. Un nuevo éxito de una prueba con solera, única en España.