El triunfo de las personas buenas

Luis Alonso fue nombrado hijo adoptivo de La Granja en su recibimiento tras culminar el Real Sitio Grand Slam Marathon.

Dicen que el final de una aventura se produce cuando uno abre la puerta de su casa. Ayer, cuando Luis Alonso llegó a la suya después de convertirse en el cuarto atleta español en completar el Grand Slam, completando una maratón en cada continente, más el Polo Norte, se encontró con que allí le esperaban muchos de sus seres queridos, bastantes de los que le admiran desde la distancia, varios de los representantes de los colectivos a los que ha dedicado sus acciones solidarias, y la práctica totalidad de la Corporación Municipal de La Granja. A eso se le llama una gran llegada a casa.

Luis Alonso concluyó su proyecto deportivo/solidario con una victoria en The Big Easy Marathon de Nueva Zelanda, y necesitado como estaba de un descanso, estuvo una semana en la otra punta del mundo recuperando energías. Pero si pensaba en algún momento que sus paisanos iban a olvidar su gesta, a su llegada a La Granja pudo comprobar que no había sido así.

Con la dulzaina y el tamboril sonando en la plaza de los Dolores, en cuanto se bajó del vehículo que le llevó hasta su casa, el atleta fue recibido por el alcalde del Real Sitio, José Luis Vázquez. Con la emoción contenida, Luis Alonso fue saludando prácticamente uno por uno al cerca de centenar de personas que acudieron a felicitarle a la puerta del Ayuntamiento. .Allí se encontraba Luna, la niña que le enseñó a Luis lo maravilloso que pueden resultar las acciones solidarias, y también estaba el presidente de la Hermandad de Donantes de Sangre, Mariano de Frutos, a quien el granjeño dedicó la acción solidaria de la carrera que disputó en Peñalara. Y un poco más atrás, varios de los componentes del CD La Granja, también destinatarios de otra de las acciones solidarias. Y también los amigos de la Asociación Adisil, y también José María Ruiz, presidente de Procose, y también otros muchos que con su aplauso y con su abrazo le dieron las gracias a un atleta que se ha convertido en uno de los emblemas de La Granja.

Ya en el Ayuntamiento, ,el Salón del siglo XVIII se quedó pequeño para acoger a todos aquellos que quisieron estar presentes en el la recepción oficial, en la que el alcalde del Real Sitio destacó la hazaña del segoviano en tres vertientes: La deportiva, «porque sin ser un deportista profesional te has comportado como tal logrando un éxito al alcance de muy pocos», la económica, «ya que nunca nadie en La Granja había conseguido promocionar esta localidad como tú lo has hecho a lo largo del mundo», y la solidaria, «porque has sabido rentabilizar como nadie la solidaridad. Y eso, con la que está cayendo, es todo un ejemplo». Por todo ello, José Luis Vázquez anunció que la Corporación Municipal del Real Sitio de San Ildefonso había decidido nombrar a Luis Alonso hijo adoptivo del municipio, un hecho que podría sorprender en un principio, puesto que en todo momento se ha considerado al atleta como granjeño, pero que tiene una sencilla explicación, ya que Luis nació en Segovia capital, y fue a los dos años cuando se trasladó a vivir a La Granja.

Hubo durante la recepción varios momentos para las anécdotas, cuando el alcalde habló de la “tribu raramundi”, para la emoción cuando Luis Alonso recordó a dos de las personas más allegadas a él que fallecieron durante este proyecto, y también para más solidaridad, porque el ya hijo adoptivo de La Granja recordó que aún queda una acción solidaria por realizar, un festival de danzas que se llevará a cabo próximamente en el Teatro Juan Bravo a beneficio de los rarámuri. Y así, con la sensación de felicidad que produce el presenciar el triunfo de las buenas personas, el pueblo de La Granja fue poco a poco retornando a la normalidad.

“Que te reciban así te deja sin palabras”.- “Llegar a casa y que te reciban así, es algo que te deja sin palabras. Ha sido un año muy duro que ahora termina. Atrás quedarán unos meses llenos de acciones solidarias, aventuras, entrenamientos, competiciones, satisfacciones, muchísimas y bellas imágenes en la retina, momentos de soledad, entrenamientos, días mejores y peores y lo más importante, la culminación de un proyecto, que asustaba hace 11 meses, pero que se ha culminado.

Estos días he podido ir asimilando un poco la magnitud de lo conseguido. Es ahora, al terminar el proyecto, cuando te das cuenta de que has cumplido con tu objetivo, que eres una de las pocas personas en el mundo que lo han terminado, el cuarto español y primero en conseguir el GSM en menos de un año.

La consecución de este proyecto tiene una base, el esfuerzo, sacrificio, tesón, continuidad, ilusión y la ayuda de la familia. Con una buena planificación de Víctor López, la colaboración y el patrocinio de diferentes empresas e instituciones y mis piernas y mi cabeza, hemos conseguido culminar el proyecto.

No me queda más que agradecer, a cuantas personas han colaborado con las acciones solidarias, a los patrocinadores y colaboradores, a mi entrenador y a mi familia por su apoyo, dedicación, solidaridad, y sus ánimos.

También agradecer la difusión de los muchos medios de comunicación que se han echo eco del proyecto.

Y para terminar no puedo olvidarme de El Adelantado, que apostó por contar todas y cada una de las etapas, con sus aventuras y desventuras, anécdotas, competiciones y acciones solidarias. Muchas gracias”.