El Unami sumó tres puntos vitales para escaparse de los puestos de descenso en una jornada que no pintaba fácil para los segovianos, ya que enfrente tenían a todo un Atlético Bembibre. Pero, a base de casta y efectividad, supieron sacar la empresa adelante comandados por Otero, autor de los dos goles del triunfo local.
En el once inicial se pudo ver a una línea defensiva inédita esta temporada en el Unami, con Quique cubriendo la baja de Pocho en el lateral izquierdo; Laruso reconvertido en lateral derecho para suplir a Maroto; y Fran y el joven Jorge –que debutó en Tercera, realizando un buen partido– como pareja de centrales.
En cuanto al desarrollo del partido, nada más pitar el árbitro comenzó a granizar, dificultando el juego sobre un césped ya de por sí en malas condiciones. Los primeros acercamientos tuvieron protagonismo segoviano, con una internada de Álex por la izquierda, que no pudo culminar con un disparo a puerta; y, seguidamente, con el tiro lejano de Mariano, que se marchó rozando el palo.
Corría el minuto 10 y la tarde se estaba poniendo cada vez más desapacible. Entre el viento y el granizo era muy complicado jugar a gusto. Aún así, quien mejor se estaba adaptando a estas circunstancias era el Unami. Por parte visitante, la primera llegada con peligro llegó con un centro desde la banda izquierda, rematado por Porfirio de cabeza, demasiado cruzado.
Poco a poco el Atlético Bembibre iba aprovechándose de los errores locales en el centro del campo para probar a Mario, como con el disparo de Olano intentando sorprender desde lejos.
Pero quien peor lo estaba pasando, con el viento helado golpeándole en la cara, era el guardameta berciano. Así, con el aire a favor de los segovianos, en el minuto 22 llegó el 1-0, obra de Otero quien, tras recoger un pase de Víctor Roldán, se sacó de la manga un disparo seco y raso ante el que nada pudo hacer el portero Ivanildo.
Poco después del gol, el Unami estuvo a punto de lograr el segundo, por medio de la internada de Álex por la izquierda. Pero el extremo azul, tras ganar la línea de fondo, no le encontró la salida correcta al balón, perdiendo su oportunidad.
Pasada la media hora el sol lucía, y amainó el temporal. Los segovianos se mantenían firmes en defensa, pero cuando tenían el balón no eran capaces de finalizar las jugadas de ataque, valiéndose solamente de las jugadas a balón parado para crear peligro.
De todas maneras, los últimos minutos de la primera parte fueron para los de casa, salvando la última oportunidad, que tuvo color rojiblanco, con el tiro desviado de Javi Amor.
Descontento con lo visto en la primera mitad, el técnico leonés realizó dos cambios en el descanso. Y, según parece, la charla de Ministro en el vestuario surtió efecto en las filas del Bembibre, que en el minuto 50 empató tras culminar un contragolpe Javi Amor, completamente solo, en una jugada que surgió de un mal saque de banda del Unami.
Pero la reacción de los azules fue rápida, y solo 5 minutos después del 1-1 consiguieron volver a adelantarse en el marcador. El tanto llegó mediante una excelente jugada individual de Otero, que se fue de varios defensas, llegó al área, y desde doce metros finalizó con un tiro cruzado.
El gol espoleó a los de Quique de Diego –que ayer ocupó el banquillo segoviano, con Tito Domingo sancionado–, pero no lograron cerrar el partido con el tercero. Y eso que tuvieron buenas oportunidades para conseguirlo, con un corner rematado primero por Laruso y después, por Álex.
Todavía quedaba un mundo por delante. Demasiados minutos como para dar nada por decidido. Por ello, la concentración era fundamental para evitar sustos, como el lanzamiento estrellado en el larguero por Dani Alonso.
Los minutos parecían horas para el Unami. El Bembibre se venía cada vez más arriba y el fantasma del empate se paseaba por el campo de La Albuera vestido de rojo y blanco.
Pero, finalmente el arreón de los visitantes a la desesperada no tuvo efecto, y los segovianos amarraron tres puntos que les ayudan a superar al Villaralbo en la clasificación.
