Zapatero revela su temor ante un pacto entre PP y CiU en Cataluña

El presidente del Gobierno pide al partido nacionalista que no se alíe con los ‘populares’ tras las elecciones si estos no se comprometen a no hacer políticas que vayan «contra» la región

Aunque la campaña acaba de empezar y aún quedan casi dos semanas para que los ciudadanos se acerquen a las urnas, parece que los partidos políticos tienen más miedo a los pactos que puedan surgir de la jornada electoral que a los resultados de las urnas.

Así las cosas, el jefe del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, retó ayer al líder del PP, Mariano Rajoy, a que se comprometa públicamente a no volver a hacer nunca más política «contra Cataluña», un desafío que roza también al representante de CiU, Artur Mas, a quien instó a garantizar que, mientras no haya esa promesa, no pactará con el Partido Popular, una posición que deja claro el temor que el presidente del Ejecutivo tiene ante una posible alianza entre ambos partidos, ya que los últimos sondeos dan la victoria a CiU, pero sin mayoría absoluta, de modo que el PP se convertirá en la bisagra para obtener la Presidencia de la Generalitat.

Zapatero dejó entrever tales miedos durante su primera intervención en la campaña catalana, en apoyo del presidente de la región, José Montilla, en un mitin en el que se mostró convencido de que los socialistas han comenzado «la remontada» y de que en la «cita histórica» del 28 de noviembre pueden dar «la sorpresa». Así, el líder del PSOE defendió la trayectoria del PSC por considerar que es «el partido de la convivencia» y aseguró que, frente a las voces que criticaban que él participara en la campaña (en alusión a Mas), aseguró que irá a Cataluña siempre que le apetezca.

Zapatero lamentó la actitud de «separatistas y separadores», e ironizó con el hecho de que la candidata del PP, Alicia Sánchez Camacho, dijera el sábado que a Rajoy algunos, como su mujer, le conocen ya como el catalán por el tiempo que pasa en este territorio.

«Después de todo lo que ha hecho… a buenas horas, mangas verdes», apostilló el presidente antes de instar a Rajoy y a otros dirigentes del PP a que, cuanto antes, hagan solemnemente la promesa de no volver a hacer política que vaya «en contra» de la región mediterránea.

Pero mientras los líderes de PP y PSOE sacan pecho ayudando a sus representantes catalanes, CiU trataba de sembrar la desconfianza hacia los partidos nacionales por cuanto dijo sospechar que ambos «necesitan una Cataluña débil». Este es el aviso que lanzaron el candidato de CiU a la Generalitat, Artur Mas, y el secretario general de la federación, Josep Antoni Duran, en el acto que tradicionalmente dedican a la familia. Mas interpretó la presencia de Zapatero y Rajoy en la campaña como que el PSC y el PP catalán no son capaces de afrontar por sí solos los comicios y, por tanto, deben venir «a rescatarlos».