Rajoy culpa al PSOE de los recortes por no cumplir con el déficit público

El líder socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba, acusa al Ejecutivo de «desmontar» el Estado de bienestar en tan solo un año y recalca que ahora «los españoles viven peor».

La pregunta parecía simple y típica al cumplirse en los próximos días el primer aniversario de la toma de posesión de Mariano Rajoy como presidente (tuvo lugar el 21 de diciembre de 2011): «¿Qué balance hace de su año al frente del Ejecutivo?». Sin embargo, el encontronazo entre Gabinete y oposición fue ayer inevitable en una de las sesiones de control más dura de los últimos meses.

Así, el popular defendió sus reformas a instancias del líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, que le reprochó, de nuevo, los recortes que está llevando a cabo el Gobierno. Unas medidas «duras y difíciles» que, según reiteró Rajoy, se hacen por culpa del Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero, que no cumplió su «compromiso» con el déficit público. Por contra, su Gabinete no se ha quedado «cruzado de brazos» ante la crisis, por lo que reiteró que «las reformas darán sus frutos».

Antes de esta réplica, el secretario general de los socialistas acusó al PP de «desmontar» el Estado social en tan solo un año, sin «dejar títere con cabeza», para añadir que la «inmensa mayoría» de los españoles vive «peor» ahora. «Y solo se me ocurre un colectivo al que han beneficiado, el de los evasores, que han tenido una generosa amnistía fiscal», aseveró. El líder de los socialistas criticó también las medidas en materia educativa del Ejecutivo popular y recordó, además, que en un año están acabando con la cobertura sanitaria «gratuita y universal».

En su turno, el presidente hizo hincapié en que el «mayor ataque» al Estado del Bienestar, a la educación y a la sanidad pública es tener unas cuentas «insostenibles». «Si el Gobierno socialista hubiera cumplido con el seis por ciento de déficit público en lugar de llegar al nueve por ciento, no habríamos tenido que gastar más de 30.000 millones», explicó.

En este sentido, aseveró que reducir la deuda pública es una condición sine qua non para crecer y crear empleo, ya que supone gastar «lo que no se ingresa» y, en ello, España tiene ahora «dificultades de financiación».

Petición de dimisión

Sin embargo, cuando a Rajoy se le vio más molesto durante la sesión, fue tras la intervención de la portavoz parlamentaria de UPyD, Rosa Díez, que le tachó de «embustero», por haber «mentido» sobre revalorizar las pensiones, al tiempo que solicitó su dimisión por esta cuestión. La exdirigente socialista no dudó incluso en hacer referencia a distintas citas sobre la mentira, tanto de la Biblia como de diversos personajes históricos.

El presidente replicó que todas las frases célebres sobre falacias y embusteros mencionadas por su adversaria se le podrían aplicar a ella y explicó que no faltó a la verdad cuando dijo que revalorizaría las pensiones, porque esa fue siempre su intención. «Al final no fue posible, me hubiera gustado, lo hemos intentado y, cuando podamos hacerlo, revalorizaremos estas retribuciones», remarcó.

El líder popular reiteró que su intención era actualizarlas según la inflación, y por eso esperaron «hasta el último momento» para tomar la decisión, pero los datos no lo permitieron.

«Estamos tomando medidas para reformar la Seguridad Social y para generar crecimiento económico y empleo para que haya cotizantes, que es la única forma de mejorar las pensiones en el futuro», zanjó Rajoy.