Lufthansa y la Autoridad de Aviación alemana están de acuerdo en que se siguieron los procedimientos correctos a la hora de conceder la licencia de piloto a Andreas Lubitz, al que se acusa de haber estrellado intencionadamente el avión de Germanwings contra los Alpes franceses el pasado 24 de marzo, indicaron ayer jueves la citada agencia.
Lufthansa indicó que Lubitz informó a su escuela de vuelo en 2009 de que había superado un periodo de depresión severa, lo que generó dudas sobre cómo se hace seguimiento a los pilotos y si deberían ser sometidos a más exámenes psiquiátricos una vez reciben la licencia.
La autoridad de aviación, la Luftfahrtbundesamt (LBA), dijo que no tenía conocimiento de la depresión de Lubitz. Sin embargo, Lufthansa, matriz de Germanwings, respondió afirmando que en virtud de las regulaciones anteriores en vigor hasta 2013, no era necesario informar a la LBA.
“Se siguieron los procedimientos correctos”, indicó la LBA.