Iglesia parroquial de Santiago Apostol. / José Antonio Santos
Iglesia parroquial de Santiago Apostol. / José Antonio Santos

A menos de 10 km de Segovia y con una población que ha ido aumentando en los últimos años hasta alcanzar los 760 habitantes, se encuentra la localidad de Bernuy de Porreros que, de esta manera, se convierte en una excepción a la paulatina pérdida de población que es común en una gran mayoría de los pueblos de Castilla.

El auge que se vive en esta localidad llegando a provocar en los últimos años un paulatino aumento de sus vecinos, se debe a que probablemente, ha absorbido un importante número de jóvenes que han encontrado allí un lugar cómodo, cercano y más barato para vivir que la propia capital.

La historia de Bernuy de Porreros comienza en el siglo XIII, cuando era citado su nombre de dos maneras diferentes en los escritos en los que se le menciona: Bernuy de Spiritu, por su cercanía a Espirdo y, Bernuy de Rubiales, por estar junto al despoblado conocido por ese mismo nombre (Rubiales). Ya en el siglo XVI, comienza a ser conocida por el nombre actual, Bernuy de Porreros.

El nombre de Bernuy de Porreros puede tener un origen vasco y su significado iría unido a “Bernubi”, que se compondría de “Bern” (Zarzas) y “Ubi” (agua o vados), alcanzando un significado de “Valle de Aguas” o “Lugar de Aguas y Zarzas”. Por otro lado, también hay investigadores que consideran que el nombre de la localidad es de origen germánico: “Bermudus”, Bera (Oso) y Mudus (Valeroso). En cuanto a “Porreros”, estaría relacionado con los “porros o porrum”, puerros que junto a los ajos eran una base fundamental en la alimentación de la dieta medieval.

Este pueblo segoviano tuvo su origen en la agricultura y la ganadería hasta que la industria, chacinera y cerámica, y su consideración de localidad residencial, se han colocado en los primeros lugares de la forma de vida principal de sus habitantes.

PATRIMONIO Para empezar, Bernuy de Porreros cuenta con una Iglesia Parroquial dedicada a Santiago Apóstol. La Iglesia es de origen medieval y, en ella se han realizado un buen número de modificaciones y reformas, sobre todo en el siglo XVIII, pero continúa manteniendo elementos originales de su estilo románico como la galería porticada con capiteles labrados y el campanario.

En el exterior de la villa, en el camino de Valseca, se encuentran las ruinas de la Iglesia de San Medel, un antiguo templo de un poblado que ya no existe. De esta iglesia aún se observa la espadaña que puede verse desde la N-601, antes de llegar a la gasolinera de San Medel. En Bernuy de Porreros también quedan las ruinas de la ermita de San Roque que era una construcción con una sola nave rectangular, realizada en mampostería y por último, en el camino de Valseca, un calvario y unas fuentes.

Ya en el interior del pueblo, se encuentran las ruinas de un antiguo molino que ahora el Ayuntamiento está recuperando como bien turístico. De momento han quitado la maleza y lo han adecentado pero, pretenden seguir realizando diferentes trabajos poco a poco “despacito porque todo vale mucho dinero pero…” dice la alcaldesa, quien añade que “algún día, si se puede, queremos restaurar el molino pero esa obra tiene un presupuesto…”. Eso sí, de momento, han restaurado la balsa que proporciona agua al molino.

Para completar el capítulo relativo al patrimonio, hay que recordar que Bernuy de Porreros cuenta con parajes naturales como El Soto de Arriba y el Soto de Abajo, manantiales y un potro de herrar.

TRADICIONES Entre las principales tradiciones de esta localidad se encuentra “la matanza”. Durante los meses más fríos del invierno, era una tradición en el pueblo hacer la matanza. Se mataba al cerdo, que se quemaba con paja raspándolo seguidamente. Se le quitaban las pezuñas y los chicos se las comían. Se hacían las morcillas y el calducho y se hacía el picadillo para hacer chorizos. El llamado “sumarrillo” se comía en el Colmenar (un lugar del pueblo) y, los chicos se hacían un columpio con una soga atada a una viga en un pajar y un saco para poder sentarse, para jugar.

Entre las tradiciones, también destacan en Bernuy de Porreros las cofradías, que han existido desde hace mucho tiempo. Ha habido siempre dos cofradías, una dedicada a San José que celebra tres domingos después de la Pascua de Resurrección el día del Patrocinio. La otra cofradía, está dedicada a Santiago.

Las dos cofradías compartían fines como ayudar en las necesidades, acompañar a los enfermos, acudir a los actos de la Semana Santa y, enterrar a los muertos. Actualmente las dos cofradías están unidas y acompañan en diferentes actos.

Y, una tercera tradición son las bodas. Estas ceremonias y fiestas tenían una gran importancia en la localidad. El día anterior a la boda se celebraban las amonestaciones, el novio se despedía de los mozos y mozas del pueblo y se repartían bollos. El día de la boda tomaban chocolate con tostadas y churros y luego se celebraba la misa, a la que acudía primero el novio y, más tarde la novia con el rostro tapado por un velo.

Al salir de la iglesia se les echaba arroz y el novio, vestido con un chaleco “tiraba al gallo”, que consistía en colgar a un gallo de un palo alto mientras el novio, tiraba tres bolas de piedra “muy calientes (para evitar la puntería) contra el ave. Si conseguía dar al gallo con la piedra, la nueva pareja se quedaba con él. Después, todo el pueblo acudía a la comida.

Al día siguiente, los novios iniciaban su viaje y, los mozos y mozas, recorrían las casas de la familia de los novios para que les dieran viandas para comer y cenar en la casa de la novia. La fiesta concluía con un gran baile para todos.

FIESTAS Entre las fiestas que se celebran a lo largo del año, en Bernuy de Porreros destacan Santa Águeda, en febrero; San Antonio, en junio; Santiago Apóstol, en julio y, Santa Ana, en julio.

BERNUY DE PORREROS HOY La localidad hoy ha dejado de dedicarse a la agricultura y a la ganadería. De hecho, la mayor parte de sus vecinos viven ligados al sector servicios y al trabajo en localidades cercanas como Segovia pues, como ya se ha comentado, se ha convertido en una localidad residencial.
Su alcaldesa desde 2007 es Mª Yolanda Benito Muñoz (PSOE), nos cuenta que en Bernuy de Porreros hay ahora tres fábricas de jamones y embutidos, una fábrica de ladrillos, una de piensos y tres o cuatro vecinos que se dedican a la construcción…

Los proyectos que desde el Ayuntamiento, su alcaldesa, tiene pensado poner en marcha en 2018 se encuentra completar la reforma que se está realizando en el Ayuntamiento con la ayuda de la Diputación Provincial que les ha concedido una subvención para ello. En este Ayuntamiento, las oficinas estaban en la primera planta y, para mejorar la accesibilidad de los vecinos, se están bajando a la planta de calle.

También está previsto el arreglo de alguna de sus calles pero sin especificar cual pues, dependerá del dinero del que se disponga ya que el arreglo no es solo asfaltar sino un completo cambio de redes y tuberías y la separación de las aguas fluviales de las residuales…con lo que la obra y el presupuesto para hacerla son importantes.

Cambiando el tema, la alcaldesa también comenta que están meditando varias ideas para poner en marcha actividades de ocio… pero, “como siempre, el dinero… manda”, nos dice Yolanda Benito.

DÓNDE DORMIR En Bernuy de Porreros existen varias Casas Rurales como “El Pajar”, con capacidad para 4 a 7 personas. Es una antigua casa rural transformada en granero en los años 70 que se ha restaurado respetando su estructura. Dispone de jardín y barbacoa.

Otra es “La Casa Rural El Choricero”, con capacidad para 10 personas. Edificio del siglo XIX, construcción típica de la zona, de piedra y madera. Dispone de chimenea y jardín.

Existe otra posibilidad, “Casa Rural Los Abuelos”, con capacidad para 6 personas. Edificio de principios del siglo XX y sus habitaciones tienen su propio baño. La casa dispone de chimenea y todas las comodidades y, para terminar, “La Casita de la Plaza”, con capacidad para 2 personas.

A la hora de comer, Bernuy de Porreros no dispone de restaurantes pero sí de algunos bares o establecimientos de hostelería que disponen de menús adecuados a la hora de realizar una visita a la localidad como el Bar La Cija.

RECETA Se llama Esperanza y es vecina de Bernuy de Porreros. Le gusta mucho la cocina y, aunque no lo reconoce, se le da muy bien. Antes era mucho más aficionada a los postres pero, ahora una de sus hijas, a quien le gusta la repostería y es toda una artista en ese campo, se encarga de estos platos mientras que a Esperanza le corresponden los típicos guisos de la cocina tradicional o, como todos tenemos que cuidarnos, las recetas que se resuelven a la plancha porque si no “la ropa encoje…. en el armario”.

Pensando en una receta, recordó la de las rosquillas de anís que en su día le enseñó a hacer su abuela en el “barreño de barro”. Es la misma receta que ahora ella está enseñando a hacer a su nieta. Una receta sencilla y con un estupendo resultado pues, de hecho, “no da tiempo a que se estropeen porque desaparecen rápidamente por muchas que haga”, nos dice Esperanza. Sí también les gustan los dulces…Tomen nota.

ROSQUILLAS DE ANÍS

Ingredientes: huevos, harina, azúcar, aceite, anís, ralladura de limón…

Modo de preparación: por cada huevo se pone en un recipiente 3 cucharadas de anís de botella o anisete, 3 cucharadas de azúcar, 4 cucharadas de aceite, ralladura de limón, un poquito de levadura y la harina que sea necesaria para hacer la masa.

Cuando se ponen todos los ingredientes y se van amasando para después hacer las rosquillas dando forma a la masa de varias maneras, una ayudándose con un vaso, otra haciendo una bolita de masa que atravesaremos con un dedo y abriremos hasta dejar a la rosquilla del tamaño deseado…, se fríen y, para terminar, se añade un poco de azúcar por encima… y tendremos un postre o un tentempié estupendo.

BERNUY DE PORREROS EN POCAS PALABRAS

Distancia:
9,8 km a Segovia.
95,8 km a Madrid.
106 km a Valladolid.

Población:
762 hab. (2017).

Alcaldesa:
Mª Yolanda Benito Muñoz (PSOE).

Patrimonio:
— Iglesia de Santiago, estilo barroco.
— Iglesia Parroquial de Santiago Apóstol.
— Ruinas Iglesia de San Medel.
— Ruinas Ermita de San Roque.
— Calvario.
— Fuentes.
— Antiguo Molino.

Fiestas:
— Santa Águeda, febrero.
— San Antonio, junio.
— Santiago, julio.
— Santa Ana, julio.

Tradiciones:
— La Matanza.
— Las Cofradías.
— Las Bodas.

Dónde dormir:
— Casa Rural “El Pajar”.
— Casa Rural “El Choricero”.
— Casa Rural “Los Abuelos”.
— Casa Rural “La Casita de la Plaza”.

Dónde comer:
— No existen restaurantes pero sí varios bares que ofrecen menús.